Slam

Me pregunto concienzudamente si en verdad el cartoon affaire se ha vuelto una cuestión de choque de civilizaciones o de incompatibilidad de valores occidente - oriente. Y aunque en definitiva la controversia tiene matices que incluyen tensiones lógicas ellos-nosotros, hay otros factores, políticos en su mayoría, que le han dado el tono actual al conflicto.

Me parece ser que el manejo de unos cuantos, desde editores, medios de información mismos, hasta políticos y algunos otros líderes de base -en su mayoría musulmanes- han hecho un manejo muy inteligente de la coyuntura para sacar el mayor provecho del desmadrito de las caricaturas de Mahoma. Ciertos círculos están haciendo usufructo de la opinión pública, cada vez más difícil de definir, eso sí, pero también cada vez más incendiaria.

El cartoon affaire cae en un claroscuro en donde son difíciles de percibir los límites de la libertad de expresión, la ética, la sin razón pero donde también encuentran cabida las cruzadas musulmanas y la aberración Mujahedeen. Esta ambigüedad facilita que cada actor utilice la controversia a su favor: the politics of dancing.

-"Siria e Irán han hecho todolo que han podido para inflamar los sentimientos y utilizar todo en su propio provecho" C. Rice
-"Charlie-Hebdo agotó una edición de 100 mil ejemplares y tuvieron que sacar otra tirada de 160 mil"
-No es tan incendiario saber que otro de los responsables de la publicación de caricaturas similares es un periódico egipcio. ¿Por qué a estos cartones no se ha hecho referencia hasta ahora? http://egyptiansandmonkey.blogspot.com/2006/02/boycott-egypt.html